Limpian arroyos para evitar inundaciones en el conurbano

Se han recuperado cursos de agua. Problemas urbanos: El plan de la provincia alcanza a 40 canales, cerca de los que viven 5 millones de personas. Limpian arroyos para evitar inundaciones en el conurbano Son uno de los desagotes principales de la red de alcantarillas. Y están tapados de basura, lo que provoca que desborden. Los trabajos los están haciendo unos mil beneficiarios de planes sociales. Cuadrilla. Un grupo de operarios ya está limpiando el arroyo Cuzco en el partido de Malvinas Argentinas. Por su trabajo cobran 600 pesos. Los arroyos que surcan el conurbano son uno de los desagotes principales de la red de alcantarillas de las calles. Sin embargo, están tan sucios y tapados de basura que no dejan que el agua fluya, lo que favorece las inundaciones. Para corregir ese problema, el Gobierno provincial lanzó un programa de limpieza y mantenimiento. Con una particularidad: las tareas las hacen unos mil piqueteros y beneficiarios del plan Jefes de Hogar. El programa "Recuperar" surgió el año pasado. Según explicaron en la Provincia, el primer paso fue contactar a los movimientos sociales de piqueteros, que formaron cooperativas con sus integrantes, todos incluidos en el plan Jefes de Hogar. Tras diversos cursos de capacitación, los operarios empezaron a limpiar los arroyos. Los primeros trabajos en marcha son los de los arroyos Cuzco, Darregueira y Claro, en el partido de Malvinas Argentinas; el arroyo Las Conchitas, de Florencio Varela; y El Gato, de La Plata. En la Dirección de Hidráulica provincial adelantaron que "en tres o cuatro meses" comenzarán las tareas de limpieza de canales de agua ubicados en Esteban Echeverría, San Fernando, La Matanza, San Martín, Lomas de Zamora, Almirante Brown, Malvinas Argentinas, Quilmes, Avellaneda y Luján. Serán 40 arroyos, zanjones y canales secundarios, que derivan en el Río de la Plata, el Reconquista o el Riachuelo. Aunque generalmente sean olvidados, los arroyos tienen un rol importante en la infraestructura contra las inundaciones. Mario Scheider, de Hidráulica, reconoció: "Siempre trabajamos para limpiarlos, pero con tareas puntuales. Por eso, a los cuatro meses ya se volvían a llenar de basura. Con este sistema apuntamos al mantenimiento". Por otra parte, al juntar tanta basura y malezas, los arroyos se convierten en descampados con mucha contaminación y malos olores. También, en lugares que dan miedo y facilitan el "trabajo" de los ladrones. Por estos motivos, en la Provincia estiman que el programa "Recuperar" beneficiará a unos 5 millones de vecinos del conurbano, los que viven cerca de los cursos de agua. Ramón Fernández, uno de los trabajadores que limpia el arroyo Cuzco, en Malvinas Argentinas, contó: "Acá no se podía estar. Cuando llovía se inundaba todo, y el olor era insoportable. Ahora un poco mejoró". Otro operario, que prefirió no dar su nombre, comentó: "La gente tira cualquier cosa. Hay sillones, televisores, carcazas de autos, animales muertos, de todo. Hace poco encontramos una bolsa con una pistola 9 milímetros, a la que le faltaban cinco balas. No la llevé a la comisaría por miedo a que me metieran preso a mí". ¿Cómo funciona el plan? Cada cooperativa nuclea a unos 35 operarios, que cobran 600 pesos y trabajan seis horas por día (más no pueden porque la limpieza de los arroyos es una tarea insalubre). Además, cuentan con ART y otros derechos laborales. A cambio, dejan de percibir los 150 pesos del plan Jefes de Hogar. La inversión que hará la Provincia supera los 25 millones de pesos en dos años. Este es el tiempo que rigen los convenios con las 30 cooperativas, en los que cada una recibirá 853.000 pesos para pagar sueldos y com prar los materiales necesarios para la limpieza. La idea es que esos convenios sean prolongados por más tiempo. De acuerdo al gobernador Felipe Solá, "se trata de que las necesidades primarias que el Estado no está cumpliendo sean realizadas de manera digna por aquellos que ocuparon el lugar del Estado", en referencia a las organizaciones sociales. Los trabajadores, en principio, están conformes. "Tengo 23 años y estaba desempleado, me bancaba haciendo changuitas de albañilería. Como estaba en el Movimiento Evita, cuando apareció este trabajo empecé. Ahora no cobró más el plan, pero gano un sueldo", contó Federico Helver. La limpieza de los arroyos no es la única tarea que el Gobierno bonaerense les encomendó a las organizaciones de desocupados. También se formaron cooperativas para, entre otras cosas, producir guardapolvos escolares y reparar salas de salud barriales.