TIGRE. ROMAN MARTINEZ, UN ABANDERADO DE LA ACTUAL FORMACION Y DANIEL PELLEGATA, UN REFERENTE HISTORICO

Martinez y Pellegata

Martínez es clave en el medio campo. Pellegata fue un defensor implacable.

Hay romanticismo en Victoria, aunque no por aquel movimiento cultural y político originado en Europa a fines del siglo XVIII que le daba importancia al sentimiento y a la revolución, sino por el estilo de buen juego que le imprime a Tigre Román Martínez, el pulmotor de la revelación del fútbol argentino. Es que el equipo de Diego Cagna comenzó una rebeldía futbolística que, hoy por hoy, lo tiene como líder de la tabla general (48 puntos) por encima de River, Boca, el centenario San Lorenzo y Lanús, el último campeón. "Increíble es una palabra que utilizo mucho. Miles de veces me dije: ésto es increíble". Nos enorgullece que la gente diga que somos uno de los mejores equipos. Ahora estamos cerca de la meta, que son los 50, pero queremos más", cuenta Martínez, hincha de Deportivo Morón, mientras conduce hacia el lugar de la cita: el taller de Daniel Pellegata, sinónimo de Tigre por su récord histórico de 360 partidos -entre 1969-1970 y 1972-1979- con esa camiseta y quien ahora se destaca como artista plástico. Un semáforo detiene su marcha en plena avenida Avellaneda, de Virreyes, y una chica en bicicleta le grita "¡Romáaan!". "Es una satisfacción que te reconozcan. Piensan que sos famoso, pero no lo tomo así. Este es un laburo como todos", dice Román luciendo una remera que no por nada reza "La vanguardia della tecnica". Tras ello profundiza: "Lo de la gente no tiene nombre; nunca nos van a dejar a pata. Llenan la cancha y hacen un gran esfuerzo porque las entradas no están baratas, eh". -Pellegata: "No sé qué tienen los árbitros contra Tigre. ¡El de Newell's no fue penal, viejo!". -Román: "Yo tiro sombreros y caños, nada más... A propósito, ¿hiciste alguno (cuadro) bueno?". El legendario defensor destacó que "lo bueno de esta campaña es que muchos chicos se van a hacer hinchas de Tigre". Mientras Román recordaba: "Decían que éramos jugadores de la 'B', pero con ganas y sacrificio demostramos que se puede jugar en Primera. Este es un equipo de verdad; no hay un jugador fantástico o estrellitas. Nos da orgullo estar a la altura de las circunstancias". Y se refirió a lo que les espera: "Va a ser difícil esta seguidilla (San Lorenzo, River, Estudiantes, Racing y Vélez), es la verdad. Pero vamos a hacer todo lo posible para sacar los resultados que todos queremos. Ojalá le ganemos a San Lorenzo y después estaría bueno figurar en los libros como los ganadores en su primer partido después de su centenario". El inglés William Blake, uno de los mayores exponentes del romanticismo, recreaba en sus pinturas un mundo extraño y fantástico, que es lo que disfruta Tigre esta temporada con los pincelazos de Román y que sueña con que el rugido de Victoria atraviese fronteras y se escuche en una Copa Libertadores de América.