Tigre los mira junto a Massa desde la punta de la tabla. TIGRE 1 - GIMNASIA J 0

Venció a los jujeños, y por el momento es líder del certamen

Tigre no tiene ganas de aflojar. Sin un gran lucimiento, jugó un más que aceptable partido para ganarle uno a cero a Gimnasia y Esgrima de Jujuy, con lo que llegó a la punta de la tabla. Pudo haber hecho algún gol más el equipo de Victoria, pero con lo que hizo le alcanzó para vencer sin problemas. Sacó ventajas rápido Tigre, en un partido que se había planteado parejo en los primeros minutos, con la posesión de pelota compartida en partes iguales por los dos. Pero un un error defensivo jujeño le dio al local la chance de ponerse arriba: Loeschbor falló en el cálculo ante Luna al saltar a buscar un envío aéreo, Luna la peinó y la pelota le cayó justo a Morel. Y Morel, por estos días, no perdona. La dejó picar y sacó un zurdazo bajo y cruzado, que se metió contra el poste izquierdo del arco de Pezzutti. Con el uno a cero, Tigre buscó aprovechar los espacios dejados por Gimnasia en el afán de buscar el empate. Los jujeños intentaron atacar por la zona izquierda, con Ricardo Gómez y Fileppi, más el agregado de Carranza que bajaba. Entre los tres zurdos trataron de generar juego, pero se encontraron con una férrea respuesta de la defensa de Tigre, con Blengio y Paparatto muy firmes, con Blanco bien ubicado en el mediocampo. Y cuando salía, Tigre lo hacía en especial a través de Rosano por derecha, con la búsqueda permanente de Luna y Altobelli, sus delanteros. El único que generó llegadas en la primera parte fue Tigre. Una media vuelta de Luna que desvió Pezzutti, un centro de Matías Giménez que Altobelli cabeceó apenas alto y una bien clarita, en el final de la etapa: un saque lateral enviado por Jerez desde la derecha al área, Altobelli le ganó a la estática defensa de Gimnasia, la peinó y Pezzutti voló para mandarla al corner. Sin sobrarle demasiado, Tigre no dejó dudas sobre su victoria parcial al cabo del primer tiempo, ante un Gimnasia inofensivo adelante e inseguro atrás.

LO CONTROLO BIEN

En el segundo tiempo, Tigre tuvo el total control del juego. Pese a que no pudo aumentar la diferencia, el gol de ventaja le fue más que suficiente para manejar el encuentro a su antojo. No sufrió ningún contratiempo serio en su defensa, y en ataque dispuso de algunas chances que falló debido a la imprecisión en el último toque, en el último metro. No hubiese estado de más un segundo gol, para darle al resultado un sello más adecuado a la diferencia que hubo entre los dos equipos. Dos fueron muy claras. A los 25, Matías Giménez se la jugó a Morel, que quedó mano a mano con Pezzutti. Tiró Morel, tapó el arquero, volvió a tomarla el de Tigre y tiró afuera. Y sobre la hora, Villegas fue el que quedó cara a cara con Pezzutti, tiró, tapó el arquero, le quedó a Luna y de nuevo ganó el uno de los jujeños. Ganó muy bien Tigre, y los mira a todos desde arriba.