Desde el corazón de Don Torcuato, el joven candidato a concejal Sebastián Rovira continúa su recorrido con una agenda cargada de encuentros con vecinos, relevamiento de obras paralizadas y la firme defensa de un proyecto que busca repensar el crecimiento urbano en Tigre. Compartió una radiografía crítica de la ciudad y un fuerte llamado a la participación vecinal. En el marco de la campaña electoral, Rovira dialogó con vecinos y comerciantes sobre la difícil situación que atraviesa Tigre y reafirmó su compromiso con una nueva forma de hacer política.
Obras paralizadas y servicios en crisis.
Según Rovira, muchas obras de cloacas en Don Torcuato están detenidas a pesar de estar cerca de su finalización: “Hay proyectos al 95% de ejecución. Dos cuadras más y se terminan, pero hoy los vecinos no pueden disfrutarlas”, expresó con preocupación.
La situación económica también ocupa el centro del reclamo: jubilados sin acceso a medicamentos, estudiantes que no pueden costear el transporte, y un sistema ferroviario en caída. “La gente está angustiada, y ese ajuste lo terminó pagando el pueblo, no la casta”, señaló, en alusión al discurso del gobierno nacional.
Escuchar como respuesta al enojo.
Durante sus caminatas barriales, Rovira se encuentra con una ciudadanía desilusionada con la política tradicional. “Soy joven, tengo 25 años, y me siento cerca de ese vecino que no tiene con quién hablar. Estamos recorriendo cada barrio con humildad, para escuchar”, aseguró.
Reconocido como uno de los candidatos más jóvenes en la provincia de Buenos Aires, el economista apuntó a generar representación desde la cercanía. “Nuestros problemas no tienen ideología. El tránsito, las torres, los servicios públicos: todo eso requiere soluciones concretas”, planteó.
Una nueva voz para un nuevo Tigre.
El candidato concluyó destacando la necesidad de involucrarse activamente: “Cuando la gente no participa, los mismos de siempre ganan. Por eso estoy acá, caminando cada barrio de Tigre, con propuestas y compromiso”.
Rovira, tercera generación de tigrense, asegura que su amor por la ciudad lo impulsa a defenderla de lo que llama “una amenaza silenciosa al funcionamiento urbano”. Su objetivo: abrir los debates, representar lo que vive el vecino y ponerle un freno al modelo de ciudad que desconoce su identidad.
Identidad y urbanismo en juego.Seba Rovira propone frenar las torres y debatir la ciudad: “No hay más margen para peleas políticas”.
Rovira criticó el decreto que suspende por 90 días las construcciones en altura en Tigre, considerándolo un intento de postergar la discusión más allá de las elecciones. Para él, las torres deben evaluarse en su contexto: “Una torre de 14 pisos en el casco histórico de Pacheco, con bomberos que solo alcanzan el sexto piso, es un riesgo real. Hay que pensar en qué ciudad queremos para los próximos 20 años”.
El freno a las megatorres: una urgencia urbana.
Rovira planteó que, desde el Consejo Deliberante, su propuesta será pausar la habilitación de nuevas torres hasta lograr consensos sobre temas centrales como el tránsito y los servicios públicos. “Tenemos cloacas que no soportan la demanda, baja presión de agua, cortes de luz… ¿cómo seguimos construyendo sin resolver eso primero?”, cuestionó.
También alertó sobre los riesgos en emergencias: “Hay barrios donde los bomberos no tienen capacidad de acceso a edificios altos. Esos debates llevan tiempo y estoy dispuesto a darlos”.
Una campaña cara a cara
El candidato se aleja de los actos masivos y apuesta por un contacto directo: “No me gustan las cosas armadas. Me gusta recorrer, saludar, presentarme, hablar con la gente cara a cara”, afirmó. Y reforzó su mirada crítica sobre las obras inconclusas: conexiones de cloacas y agua sin funcionar, basura acumulada y proyectos culturales abandonados.
La política, entre el abandono y la reacción electoral.
Sobre la situación de Don Torcuato, Rovira fue contundente: “Hoy pintan baches y levantan basura porque vienen las elecciones. Pero la gente ya no come vidrio”. Para él, los vecinos necesitan respuestas reales, no gestos cosméticos.
Cuestionó también el uso de disputas internas: “La gente está mal. No hay margen para peleas entre políticos. Hoy el foco debe estar en los trabajadores, los jubilados, los estudiantes sin oportunidad”.
Compromiso con el territorio.
Acompañado por referentes locales y con el respaldo de figuras provinciales y nacionales, Rovira adelantó que tanto Malena Galmarini, Katopodis, Daniel Arroyo como Axel Kicillof y Sergio Massa visitarán Don Torcuato para acompañar su propuesta.
“Torcuato está muy abandonado, pero tiene muchísimo para dar. Vamos a trabajar para estar a la altura de lo que los vecinos merecen”, cerró.