Encuentran muerto al represor Hector Febres en la Prefectura de Tigre

El fallecido Hector Febres

El expediente de Hecor Febres

Escuela de Mecanica de la Armada

Héctor Febres, represor juzgado por crímenes en la dictadura argentina, muere en prisión. El ex marino argentino Héctor Febres fue hallado muerto hoy en la dependencia en la que estaba detenido mientras era juzgado por delitos cometidos durante la última dictadura militar (1976-1983), informaron fuentes judiciales. Si bien versiones extraoficiales indican que Febres falleció por causas naturales, el motivo del deceso no había sido determinado, por lo que se llevará a cabo una autopsia por orden de la jueza interviniente en el caso, puntualizaron.El ex marino estaba siendo sometido a juicio como presunto coautor de cuatro casos de privación ilegal de libertad y aplicación de tormentos a detenidos en la Escuela de Mecánica de la Armada (ESMA), donde funcionó la mayor cárcel ilegal de la dictadura. A cuatro días de que se diera a conocer la sentencia al cabo de ese proceso, esta mañana Febres fue encontrado sin vida en la habitación de una base de la Prefectura Naval (guardacostas) de las afueras de Buenos Aires en la que estaba detenido. Las fuentes precisaron que los prefectos asignados a la custodia del ex marino, de 65 años, notaron que no se levantó a desayunar y cuando abrieron la puerta de su dormitorio lo hallaron muerto. Añadieron que una vez que se determinen las causas del deceso de Febres, "se tomará la decisión que corresponda sobre el juicio" al que estaba siendo sometido por parte del Tribunal Oral Federal Número 5 de la capital argentina. El mes pasado tanto la Fiscalía como las partes querellantes solicitaron a los jueces una condena de 25 años de cárcel para el ex marino, quien estaba preso desde hace cuatro años, mientras que la defensa pidió la absolución y planteó la nulidad del juicio. Se trata del primer proceso que se lleva a cabo en este país por crímenes cometidos en la ESMA, donde según los organismos de derechos humanos estuvieron cautivas unas cinco mil personas. Originalmente el veredicto iba a darse a conocer el próximo viernes y numerosos testigos que prestaron declaración durante el juicio dijeron que el acusado participó en sesiones de torturas a detenidos en la ESMA. Según datos oficiales, 18.000 personas desaparecieron en Argentina en la última dictadura militar, aunque los organismos de derechos humanos elevan la cifra a 30.000.

HALLAN MUERTO A FEBRES, JUZGADO POR DELITOS EN LA ESMA

El ex subprefecto Héctor Febres, juzgado por violaciones a los derechos humanos durante la última dictadura militar, fue encontrado muerto esta mañana en dependencias de la Prefectura Naval Argentina, en la zona del delta bonaerense, donde se hallaba detenido. Fuentes vinculadas al Tribunal Oral Federal número cinco (TOF5), a cargo del juicio que se le seguía por privaciones ilegales de la libertad y tormentos a detenidos en la Escuela de Mecánica de la Armada (ESMA), confirmaron que se ordenó una autopsia para determinar la causa de la muerte. “Hay que esperar las conclusiones de los especialistas”, dijo una de las fuentes. Con el resultado de los estudios médicos se podrá precisar, además, el momento de la muerte, ocurrida entre anoche y esta madrugada. Las fuentes consultadas dijeron que a los guardias de la Prefectura donde Febrés estaba preso les llamó la atención que, llegada la hora, el detenido no fuera a desayunar. El hecho se registró días antes que el TOF 5 diera a conocer su veredicto en el juicio al ex subprefecto por la privación ilegal de la libertad y tormentos a Carlos Lordkipanidse, Josefa Prada de Olivieri, Carlos Alberto García y Alfredo Margari. Febrés, de 65 años, alias “el gordo Daniel” o “Selva”, también estaba procesado por otros casos de delitos de lesa humanidad en el ámbito de la ESMA, pero los mismos aún no fueron elevados a la etapa oral. Por los hechos que tuvieron como víctimas a Lordkipanidse, Prada de Olivieri, Garcia y Margari, la querella y la fiscalía había pedido 25 años de prisión, en tanto que el defensor oficial Víctor Valle reclamó la absolución de su asistido. El TOF5 había dispuesto un cuarto intermedio hasta el próximo viernes, para que Febres hiciera uso de su derecho a pronunciar las “últimas palabras” antes de conocer la decisión del tribunal. La ley establece que la “muerte del imputado” extingue la acción penal. El juicio a Febres había comenzado el 18 de octubre último y declararon, en su mayoría con tenor incriminatorio, alrededor de medio centenar de sobrevivientes de la ESMA. El proceso oral contra Febres fue el primero en el que se ventilaron los ilícitos cometidas durante el período 1976-1983 en la ESMA, considerado el centro clandestino de detención más importante que funcionó en el país durante la última dictadura, ya que por allí se estima que pasaron miles de detenidos.

QUERELLANTE “ENOJADO CON LA MUERTE DE FEBRES”

El paso del tiempo y la impunidad de la que gozó merced a las leyes de Obediencia Debida y Punto Final posibilitaron que el ex Prefecto Héctor Febrés falleciese “técnicamente inocente” ya que aún no se le había dictado ninguna condena en los más de dos centenares de casos por los que estaba imputado. Como paradoja del destino y una burla cruel de la impunidad, el sindicado represor que actuaba en la Escuela Superior de Mecánica de la Armada (ESMA), falleció en el Día Internacional de los Derechos Humanos tal como había ocurrido hace exactamente un año con el dictador chileno Augusto Pinochet Ugarte. Las ineludibles comparaciones y siniestras coincidencias llevaron al abogado Rodolfo Yanzón a afirmar que se encontraba “enojado con la muerte y la impunidad” tal como resumió su sentimiento, en diálogo con Télam a escasas horas de conocido el deceso de Febrés. Esas siete palabras probablemente las compartan las víctimas de Febrés en el centro clandestino de detención que funcionaba en la ESMA donde el ex prefecto recibió el apodo de “selva”, por reunir “el salvajismo de todos los animales juntos”, según testimonios recogidos en el juicio. El Tribunal Oral en lo Federal Cinco estaba juzgando a Febrés, desde hace casi dos meses, por delitos de “lesa humanidad” cometidos en la ESMA y ya había escuchado decenas de testimonios y los alegatos de los acusadores que habían pedido 25 años de prisión y de la defensa que reclamó la absolución de su asistido. Como el debate aún no se había clausurado (ello iba a ocurrir el viernes tras las “últimas palabras” del procesado), corresponderá ahora declarar “extinguida la acción penal por fallecimiento del imputado”, tal como lo prevé el artículo 59 del Código Penal, con lo cual devendría el “sobreseimiento” sin más trámite, explicaron reconocidos procesalistas penales. Este era el primer juicio oral y público por delitos cometidos en el centro clandestino de detención que funcionó en la ESMA durante la última dictadura militar que fue posible gracias a la derogación y declaración de “nulidad insalvable” de las leyes de impunidad que impidieron su juzgamiento por esos hechos ocurridos hace casi tres décadas. Al comenzar el proceso y cuando se le ofreció a Febrés la posibilidad de hacer su descargo en una declaración indagatoria dijo que “por ahora” no lo haría; su última posibilidad iba a ser el viernes próximo. El ya no hablará y las víctimas ni siquiera podrán escuchar una sentencia condenatoria.

DEFENSA PEDIA LA ABSOLUCION DE REPRESOR FEBRES

La defensa del represor Héctor Febrés afirmó hoy que los secuestrados en la ESMA durante la dictadura no eran para el acusado “presos políticos” sino “personas fuera de la ley”, al reclamar su absolución en el juicio oral que se le sigue por tormentos a cuatro sobrevivientes. Además, el defensor oficial Víctor Valle pidió al Tribunal Oral Federal 5 que no aplique la figura de “detenidos políticos” con las víctimas y que, en caso de no absolver a Febrés, califique el delito como “vejámenes”, con menor pena que “torturas”. Con la exposición del defensor Valle concluyó hoy la ronda de alegatos del juicio, durante la cual los querellantes y la fiscalía pidieron 25 años de prisión para el ex miembro de la Escuela de Mecánica de la Armada. Febrés no consideraba a los secuestrados de la Escuela de Mecánica de la Armada como “perseguidos políticos sino personas fuera de la ley”, expresó su defensa. A “Febrés ni se le ocurría pensar que (los prisioneros) estaban ahí porque fuesen peronistas o radicales, entendía que eran personas que habían cometido delitos”, sostuvieron los defensores oficiales Valle y Rubén Carnevaro. Por la mañana, el extenso alegato comenzó con una serie de planteos de “nulidades procesales” que, a criterio de la defensa, deberían derivar en la absolución de Febres, quien habría sido indagado irregularmente. Pero posteriormente y para el caso que los integrantes del Tribunal Oral no compartan sus posturas, desgranaron la prueba producida y aludieron a supuestas “contradicciones” de los testigos que fueron víctimas de Febrés como secuestrados en la ESMA. Por ello, los defensores instaron a los jueces a “examinar (los testimonios) cuidadosamente, con prudencia y cautela” y aludieron a que la condición de damnificados podría llevar a los testigos a volcar esa “inquina” en sus dichos. Valle fue quien más cuestionó los aspectos técnicos del procesamiento con prisión preventiva dictado por el juez federal Sergio Torres el 3 de junio de 2004 y calificó como “increíble” esa resolución, luego confirmada por la Cámara Federal. En uno de los cuatro casos por los que se juzga a Febrés, el del sobreviviente Carlos García, se reclamó la absolución al entender que el ex prefecto aparece acusado en otra causa relativa a su persona, por lo que se violaría el principio según el cual nadie puede ser juzgado dos veces por un mismo hecho. Además se lo juzga por tormentos contra Carlos Lordkipanidse, Josefa Prada de Olivieri y Alfredo Margari. Las querellas y la fiscal Mirna Goransky coincidieron en pedidos de 25 años de prisión para el detenido, quien está procesado en otras causas por delitos de lesa humanidad en las que también será llevado a juicio. En su alegato final la semana pasada, la fiscal sostuvo que Febrés cometió “incontables felonías” en el centro clandestino y que “las Fuerzas Armadas, durante el terrorismo de Estado, diseñaron un plan de exterminio de su propio pueblo”. El juicio oral continuará con las “réplicas” a los alegatos y luego de las últimas palabras del acusado, será el momento del veredicto, previsto para el 14 de diciembre.

COMO ERA EL ALEGATO DE LA DEFENSA DE EX PREFECTO FEBRES

El juicio oral y público contra el ex prefecto Héctor Fabres acusado de delitos de “lesa humanidad” en la Escuela Superior de Mecánica de la Armada (ESMA) se reanudó con el alegato de la defensa del único imputado. Febres afronta un pedido de pena de 25 años de prisión en el que coincidieron las querellas y la fiscal Mirna Goransky quien sostuvo que Febres cometió “incontables felonías” en el centro clandestino de detención que funcionaba en la ESMA durante el autodenominado “Proceso de Reorganización Nacional”. En la audiencia de hoy el defensor oficial Víctor Valle intentará desmoronar la acusación construida en base a medio centenar de testimonios recogidos durante la decena y media de audiencias que llevó adelante el Tribunal Oral en lo Federal Cinco (TOF5) en la Sala de Audiencias del subsuelo de los tribunales de Comodoro Py 2002, de esta Capital. La semana anterior, en su alegato, Goransky enfatizó que “las fuerzas armadas, durante el terrorismo de Estado, diseñaron un plan de exterminio de su propio pueblo” e hizo suyo el mismo pedido de pena que habían efectuado los querellantes. En esa ocasión la fiscal reseñó todos y cada uno de los hechos que imputó a Febres por los que finalmente pidió su condena por los secuestros, tormentos y “condiciones inhumanas de detención” a que fueron sometidas sus víctimas. En el primer juicio oral tras la derogación y declaración de nulidad de las leyes de obediencia debida y punto final, en el que se ventilan los hechos ocurridos en la ESMA, Febres es el único imputado pero, dijo Goransky, “el autor no es él solo y los hechos que aquí se juzgan tampoco son todos los que se cometieron en ese campo de exterminio donde se esclavizaba a los prisioneros”. “Las víctimas de la ESMA no son sólo ellos (en referencia a Carlos Lordkipanidse, Josefa Prada de Olivieri, Carlos Alberto García y Alfredo Margari, los sobrevivientes que actúan como querellantes en este juicio), el autor no es solo Febres y los hechos tampoco son todos”, al reiterar sus críticas ante la negativa del TOF5 a unificar todas las causas. Los abogados querellantes Rodolfo Yanzón y Luz Palmas Zaldúa, también se lamentaron que Febres haya llegado a juicio sólo por cuatro hechos, ya que “para que no haya impunidad” tendría que ser juzgado “junto a muchos otros represores” como Alfredo Astiz, Jorge Acosta, Antonio Pernías “por todos los casos” de delitos de lesa humanidad cometidos en la última dictadura, añadieron. La fiscal sostuvo que la ESMA debía ser un “instituto de formación” que pasó a tener “durante el terrorismo de Estado, la siniestra función” de convertirse en un “campo de exterminio donde se esclavizaba a las personas”, y que el juicio “nos permitió a nosotros ver lo que ellos (los prisioneros) no podían porque estaban tabicados y encapuchados”. También criticó a Febres por el “vergonzoso silencio” que guarda sobre el “destino de los niños” que nacieron en la maternidad clandestina que funcionaba en la ESMA donde eran llevadas a parir las secuestradas embarazadas y perversamente bautizada “la Sardá de la Armada”. De acuerdo a las previsiones iniciales del TOF5, finalizado el alegato de la defensa se realizará un cuarto intermedio hasta la semana próxima cuando será el turno de las “réplicas” y “dúplicas” en tanto se estima que el 14 de diciembre se conocerá el veredicto y el 21 el texto íntegro de los fundamentos de la sentencia.

ACUSACION Y DEFENSA QUERIAN REPLICAR ARGUMENTOS

La acusación y la defensa del ex prefecto Héctor Febrés, acusado por delitos de “lesa humanidad” en la Escuela Superior de Mecánica de la Armada (ESMA), comenzarán a replicar los argumentos de sus oponentes, en una de las últimas etapas previas al dictado del veredicto. Así lo confirmó esta mañana el abogado Rodolfo Yanzón, querellante en estas actuaciones en representación de dos sobrevivientes, quien recordó que el próximo 14 de diciembre el Tribunal Oral en lo Federal Cinco (TOF5) dará a conocer el veredicto. De acuerdo a las previsiones del TOF5 el 21 de diciembre se leerán los fundamentos de la sentencia que recaiga en esta causa en la que la fiscalía y la querella reclamaron 25 a[os de prisión para el ex alto oficial de la Prefectura Naval y la defensa su absolución. En la última jornada los Defensores Oficiales Víctor Valle y Roberto Carnevaro pidieron que se exima de responsabilidad a su asistido al considerar que “no está probada” la aplicación de tormentos a cuatro prisioneros que se hallaban ilegalmente cautivos en ese centro clandestino de detención. Días antes la fiscal Mirna Goransky, y los acusadores particulares coincidieron en pedir 25 a[os de prisión para Febrés por privación ilegal de la libertad y tormentos “agravados por ser contra perseguidos políticos”, aplicados a Carlos García, Carlos Lordkipanidse, Josefa Prada de Olivieri, y Alfredo Margari. La defensa afirmó que el imputado no consideraba a los cautivos en la ESMA como “perseguidos políticos sino (como) personas fuera de la ley”; mientras que la fiscalía sostuvo que Febrés cometió “incontables felonías” en el centro y que “las fuerzas armadas, durante el terrorismo de Estado, dise[aron un plan de exterminio de su propio pueblo”. A “Febrés ni se le ocurría pensar que (los prisioneros) estaban ahí porque fuesen peronistas o radicales, entendía que eran personas que habían cometido delitos”, sostuvieron Valle y Carnevaro. Goransky, por su parte, sostuvo que en “ese campo de exterminio donde se esclavizaba a los prisioneros”, en referencia a la ESMA se cometieron los delitos que inscribió en el marco de un “genocidio” perpetrado por el autodenominado “Proceso de Reorganización Nacional”.