Tras su paso por Costa Rica, Néstor Ramljak y compañía se concentran en un disco que deja ver que la banda es flexible.Doce años no pasan sin dejar su rastro. No se trata de envejecer, se trata de cambiar; del ajuste que, naturalmente, se va haciendo cuando las fiebres ya fueron quemadas y cuando las experiencias agolpan.
Nonpalidece no tiene por qué ser la excepción a la regla. Luego de haber –de jovenzuelos– demostrado que hacía roots y de haber hecho muchos conciertos eléctricos en su vida, ahora están en una actitud, no reposada, sino más de relajación, que les permitirá cuajar un nuevo disco.
Mucho ha pasado por Nonpalidece. De hace unos meses para acá la banda se atrevió a cambiar de formato: pasó a hacer acústicos; se arriesgaron a usar cuartetos de cuerdas y sitar (instrumento de cuerdas tradicional de la India).
Ni siquiera Nonpalidece sabía cómo reaccionaría el público, y aún así, tomó el riesgo.
Orgánicamente la banda va entrando en cintura y holgura, a tal grado, que maduran un nuevo disco donde ya no todo está concentrado en Néstor Ramljak.
Nonpalidece estuvo en Costa Rica a finales de julio para participar del Roots Time Festival . Hicieron clic con el trombonista tico Andrés Cervilla y su grupo Infibeat. Quizás esta relación rompa fronteras, pues analizan la posibilidad de que el tico grabe con Nonpalidece algunos temas.
En un cara a cara con Viva , Néstor Ramljak habló sobre el Nonpalidece de hoy, y el que será mañana con un nuevo y cuarto disco.
¿Qué está pasando hoy con ustedes, Nonpalidece?
El reggae está muy fuerte en Argentina ahora, estamos gozando de mucha popularidad, viene mucha gente a los shows .
Interesante repunte porque hace unos años la cosa era más combativa pero en el underground .
Sí claro, incluso hay un festival muy grande, el Pepsi Music, que trae artistas de todas partes del mundo y le dan un día al reggae y es el día que más gente llega.
Trabajan en un cuarto disco. ¿Por dónde va la idea? ¿qué es lo que están peloteando?
La línea musical de la banda es clásica, sigue siendo roots .
Como siempre.
¡Exacto! Pero si estamos metiendo algunos ingredientes de sonidos electrónicos. Cuando la banda abre su abanico musical no fusiona tanto con el ska , pero si más con el dub , como con la loquera. Incluso tiene mucho que ver con lo que hacemos en vivo, que improvisamos y armamos loqueras. Estamos tomando en cuenta la popularidad que tiene el reggae en Argentina en este momento, y la popularidad que tenemos nosotros, porque somos uno de los referentes, somos de las pocas bandas de reggae que salen a tocar a otros países. Así que por todo esto es que estamos muy concentrados en este disco; el gran objetivo del año es poder hacer un disco del cual nos sintamos orgullosos.
Y en términos de contenido, ¿seguirán manteniendo la misma línea temática de otros discos?
Bueno sí, porque son las inquietudes que tenemos. Y viene mucha gente joven a vernos, y nos parece bien conservar los temas que tocamos en las líricas (letras), como la mirada que tenemos nosotros hacia la naturaleza, cómo nos afecta y lo que nos brinda. Tratamos de hacer hincapié también en esa parte porque consideramos que el mundo se está yendo al diablo en términos ecológicos. Nosotros vivimos en Tigre, es un lugar que tiene delta. Ríos donde se han bañado nuestros abuelos ahora están contaminados. Y la línea que tratamos de manejar en la lírica es como un despertar, creemos en la revolución que puede causarse uno mismo a partir de una reflexión, y de revisar cuál es papel que una juega. Muchas veces uno espectador y no protagonista, y nosotros queremos incentivar a que vos seas protagonista de lo que hacés y de la reacción que tiene eso; de la causa y efecto.
Y en este sentido mantendrá entonces el discurso de resolver pacíficamente siempre.
Sí, yo le llamo resolver de forma más espiritual, y es que nos sale así. La idea del disco es seguir esa línea, pero también son otras canciones. Antes el que más componía era yo y eso marcaba una línea, ahora están componiendo otros chicos de la banda y eso da nuevos perfiles.
¿Y este nuevo disco le es urgente a Nonpalidece?
En realidad hay como una presión con este cuarto disco. Con el tercero nos fue muy bien ( Hagan correr la voz ), así que un cuarto disco yo considero que tiene que ser fabuloso. No quiero que hayan temas de relleno, prefiero hacer un disco de nueve canciones o diez canciones que meter un disco de 16 piezas y que vos estés escuchando el compact y pasés de una canción.
¿Cómo llegaron los acústicos?
Este disco ( Hagan correr la voz , el tercero de la banda) ya tiene dos años en Argentina, y sentíamos que el público necesitaba algo nuevo en el show , así que ideamos estos acústicos. Hacemos reversiones de nuestras canciones, les ponemos cuartetos de cuerdas, algunas las hago yo solo y hasta un amigo que toca el sitar (instrumento de cuerdas tradicional de la India) nos hizo unas intros .
¿Fue difícil para Nonpalidece pasar del eléctrico al desenchufado que hicieron y hacen aún?
La verdad es que sí. La verdad es que fue muy jugado. Podían pasar dos cosas: que a la gente le gustara, o que nos odiaran; porque la gente que nos va a ver a nosotros está acostumbrada a que la banda sale y se ponen a bailar y a cantar.
¿Y del proceso del acústico algo se colará en el cuarto disco?
Sí, siento que lo que se está colando para este disco es que estamos cada vez más descontracturados, eso mismo es lo que pasa al incluir otros sonidos, otros instrumentos, y estamos más relajados a la hora de hacer las canciones. Como que ya dimos la prueba de que somos una banda de roots , pero también tenemos muchas inquietudes musicales. La banda está muy bien ahora, así que, cuando juntamos a grabar hay linda comunicación musical.