El incidente, según se conoció pese al hermetismo de la Policía local, se produjo en la madrugada del sábado 16 de enero en la “estación policial Buenos Aires 2” situada en avenida del Trabajo al 1.300 y comenzó con un operativo para detener delincuentes en la villa de emergencia San Jorge.
Enseguida, varios jóvenes, luego de interrumpir el tránsito por la Avenida del Trabajo de la villa atacaron la sede policial y se produjo un enfrentamiento armado, relataron vecinos de la zona.
Varios efectivos de la comisaría tercera de Tigre se dirigieron al lugar.
La estación de la Policía Buenos Aires 2 se inauguró sobre la avenida del Trabajo con el fin de detener la ola de robos registrada en esa zona cercana a la estación de trenes de Don Torcuato.
Por el hecho,dos policías de la Bonaerense fueron desafectados en forma preventiva por la muerte de un hombre de 60 años, que recibió un tiro en la frente al quedar en medio de un tiroteo con delincuentes en un villa de Don Torcuato.
La medida fue adoptada por la Dirección de Asuntos Internos del Ministerio de Seguridad de la provincia, hasta que se establezca si la víctima falleció a raíz de una bala policial o de los ladrones.
El hecho se produjo el viernes 15 de enero, alrededor de las 19 hs, cuando dos asaltantes de entre 17 y 20 años le robaron un auto Renault 19 a un remisero que circulaba por Asunción y José Hernández a escasos 200 metros de la PB2, en Don Torcuato.
Tras escapar con ese vehículo, advirtieron que un hombre llegaba a su casa con un Alfa Romeo, por lo que abandonaron allí el Renault y escaparon en el otro vehículo, con su dueño como rehén.
Una hora después se inició una persecución, en la que los ladrones dispararon contra la policía. Fuentes de la investigación dijeron que los efectivos también efectuaron disparos disuasivos ante la sospecha de que el dueño del auto se hallaba dentro del vehículo.
Finalmente, los delincuentes detuvieron su marcha frente a la villa San Jorge e ingresaron al asentamiento a la carrera, donde finalmente lograron esconderse.
En medio del tiroteo, un parroquiano de frodosos antecedentes que se hallaba dentro de un bar y pool del barrio salió del local para ver lo que ocurría y recibió un tiro en la frente.
El hombre, identificado por la policía como Julio Villanueva (60), cayó malherido y fue auxiliado por los mismos efectivos que participaban de la persecusión, quienes lo trasladaron al Hospital de General Pacheco, donde agonizó durante casi dos días y murió.
Al ver lo que había ocurrido con Villanueva, los vecinos del barrio de emergencia San Jorge se concentraron frente a un destacamento de la Policía Buenos Aires 2, ubicado en la avenida Del Trabajo al 1300 esquina José Hernandez de Don Torcuato, para exigir el esclarecimiento del hecho.
A partir de la muerte del hombre, la causa se desdobló en dos: la fiscalía de turno de Tigre quedó a cargo de la causa por el robo de los autos, mientras que el crimen de Villanueva pasó a ser investigado por la fiscalía Nº1 de Pilar, a cargo de Marcos Peterson Victorica pero subrogada durante la feria judicial por Gonzalo Acosta.
La división se produjo porque hay una disposición de la Procuración General bonaerense que ordena que cuando hay policías presuntamente involucrados en un homicidio, el expediente debe pasar a otra jurisdicción. De lo contrario, serían investigados por algún fiscal con el que habitualmente trabajan como auxiliares.
En la causa que lleva adelante Acosta, el fiscal ordenó el secuestro de las armas que los policías portaban al momento del operativo y la autopsia del vecino, cuyo resultado aún no se conoce.
Un vocero explicó que en caso de que se pueda extraer el proyectil del cráneo se realizará un peritaje para determinar si la bala que mató al hombre pertenece a alguna de las pistolas 9 milímetros de los policías.
Voceros del Ministerio de Seguridad bonaerense explicaron que mientras tanto, los dos uniformados que intervinieron en el tiroteo fueron desafectados de sus funciones por orden de la Dirección de Asuntos Internos de esa cartera, a cargo de María Alejandra Provítola.
El día sábado por la tarde, vecinos del barrio San Jorge volvieron a reaccionar. Según comentan testigos, los vecinos habían logrado un acuerdo con el sub-jefe de la policía de Tigre Herrera, el cual comprometía a ambas partes al diálogo para mejorar la seguridad del barrio, y el trato de la policía hacia los vecinos que nada tienen que ver con esta clase de hechos policiales.
Al Frente de esa negociación estuvo en pastor evangélico Nestor Mercado como intermediario sin intereses personales, quien en conjunto con autoridades municipales de la delegación don Torcuato Oeste a cargo de Fernández Miranda y otros, los cuales en momentos de la tarde del sábado 16 de enero, no pudieron controlar a un conjunto de jóvenes que no tenían nada que ver con lo que se estaba negociando con los vecinos, quienes empezaron a agredir a todos los presentes, reclamando una rápida manifestación en contra del accionar policial, lo que obligó la evacuación de las autoridades del barrio por el cruce peatonal del las vías del ferrocarril Belgrano a la altura del ex matadero, justo en frente a la PB2.
Como saldo del enfrentamiento ocurrido entre manifestantes del barrio San Jorge y la policía con apoyo del grupo de infantería, fue herido otro muchacho de nombre “Facundo” de un disparo en la espalda quien falleció en pocos minutos, lo que provocó la ira de los manifestantes que quisieron marchar a la comisaría de Don Torcuato.
De todas maneras este jueves 21 de enero a las 18 horas, unos 500 manifestantes marcharon pacíficamente con pancartas, bombos y redoblantes, quienes se demoraron en la organización de la misma por falta de apoyo barrial, desde el barrio hasta la comisaría de Don Torcuato por la ruta 202 cortándola en una sola mano, y reclamando por las 2 muertes en los enfrentamientos policiales y los esclarecimientos de los hechos, y escracharon un local partidario en la ruta 202 con un mensaje dirijido a la bonaerense “Policías asesinos”.
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