TIGRE, LAS TUNAS. Fue clausurada hoy la papelera Santa Ángela

Durante un operativo conjunto realizado por el Organismo Provincial para el Desarrollo Sostenible (OPDS), la Autoridad del Agua (ADA) y la Secretaría de Inversión Pública, Urbanismo y Gestión Ambiental del Municipio de Tigre.

En la papelera ubicada en Las Tunas –que produce e imprime cajas de cartón corrugado a partir de material reciclado- se encontraron serias deficiencias en cuanto a la seguridad industrial y la red de incendios, así como en el tratamiento de efluentes que son volcados al arroyo Las Tunas –que es parte de la cuenca del río Reconquista-.

Participaron del operativo la Directora General de Gestión Ambiental del municipio de Tigre, Leticia Villalba, y los inspectores Natalia Montanari y José Yoma, quienes acompañaron a los equipos de OPDS y ADA, apoyados por personal de la Policía Ecológica provincial.

Si bien la clausura rige desde esta tarde, se efectivizará por completo el viernes 16 por la tarde, cuando pueda completarse la detención de todos los procesos de producción. Es decir que, aunque es parcial, la clausura implica el cese de la fabricación de fabricación de papel. Durante la inspección, se observaron deficiencias en aparatos sometidos a presión, estudios de carga de fuego, red de incendios y matafuegos y control de efluentes líquidos vertidos al arroyo Las Tunas, entre otros problemas.

Por estas razones, además de tomar muestras para análisis, el OPDS y el municipio procedieron directamente a clausurar la planta, por estar en riesgo de accidente o incendio, comprometiendo la seguridad del personal y de los vecinos de la zona. Esta situación -independientemente de los resultados que arrojen los estudios que se realizarán sobre las muestras de efluentes, suelos y residuos especiales encontrados- resultó razón suficiente para disponer el cierre de la planta hasta tanto la empresa presente ante las autoridades provinciales y municipales un plan de mejoras y adecuaciones.

Dicha propuesta, con un cronograma de ejecución estricto, será evaluada por los peritos y, una vez aprobada, permitirá que se reanude la producción en condiciones que no sean nocivas para el medio ambiente o riesgosas para los vecinos y los trabajadores. El mensaje es claro: las empresas tienen la obligación de ajustar su trabajo a lo que exigen las normas; controlar y -llegado el caso- sancionar los incumplimientos, es parte del trabajo que se viene realizando en Tigre.