Salidas cerca del country

Una guía con los circuitos clásicos y los nuevos centros de entretenimiento. Desde la apertura del casino, en la década del 90, Tigre cobró protagonismo. Años más tarde, y con la naturaleza como marco inapreciable, la construcción de barrios cerrados y countries convirtió la zona en próspera y pujante. Pero Tigre sigue sumando: además de la población extendida y los asiduos visitantes, hoy es uno de los más importantes puntos turísticos de Buenos Aires. El Paseo Victorica es un sitio obligado. A lo largo de las ocho cuadras del Paseo confluye la mayor oferta gastronómica, con propuestas para diversos paladares y presupuestos. Para conseguir mesa en Il Nuovo María Luján (en Paseo Victorica 611), el restaurante más elegante, hay que armarse de paciencia. "El público que recibimos es variado. Viene gente del lugar, de la Capital y también muchos turistas", detalla Edgardo, el gerente del lugar. Con una extensa carta de vinos, se puede comer por $ 60 por persona (el precio varía de acuerdo al vino elegido). Otras opciones: la Parrilla Don Manuel (Paseo Victorica 290) ofrece una parrillada para cuatro personas por $ 60 y un plato de pastas por $ 11. En la pizzería La Draga se puede pedir el menú turístico por $ 22, con gaseosa. Después del almuerzo, en Paseo Victoria y Emilio Mitre, la opción es visitar una feria de diseño, con diversas propuestas en materia de ropa y accesorios de moda. Al final del Paseo Victorica (Paseo Victorica 972) está el Museo de Arte Tigre, una joya arquitectónica de 1912 donde funcionó hasta hace pocos años el Tigre Hotel. Y para terminar la salida, nada mejor que visitar el famoso Puerto de Frutos, una mega feria al aire libre donde miles de personas recorren sus cientos de locales para conseguir muebles y objetos de decoración. La oferta incluye muebles de ratán y mimbre, velas, mantas de telar, ropa de cuero, entre otros artículos. ¿Algunos precios? Un modular en madera de sándalo cuesta $ 940; una alfombra de oveja, $ 420; una mesa bodeguera para ocho personas, $ 9.568; una biblioteca de madera importada de Indonesia, a $ 1.510, un sillón de ratán de dos cuerpos, a $ 2.209 o de un cuerpo, a $ 1.068. Un consejo: conviene ir con tiempo, para recorrer todos los locales. También hay otros paseos para tener en cuenta y que suelen ser los elegidos por los residentes de la zona. En la avenida Liniers y Chingolo, el centro comercial Punto Tigre es una alternativa. Diseñado en dos pisos, cuenta con 30 locales, un restó con wi fi y un patio de juegos para los más chicos. A cinco minutos de allí, se encuentra el centro comercial Santa María de Tigre, con sus 25 locales, que ofrecen indumentaria, servicios de peluquería, informática, consultorios, veterinaria, lavandería, heladería, un bar y una pizzería. El mega Nordelta también dispone de espacios comerciales y de servicios. En el Paseo de la Bahía inauguró un complejo de oficinas, restó y bar. El detalle: un puente y un deck desembocan en una pérgola que asoma a una entrada ganada al río Luján. Además, cuenta con un centro comercial, que fue inaugurado en 2004. Diseñado con una calle central y locales comerciales que desembocan en el patio central. Para pasar un momento distendido, hay restaurantes, bares y cafés, rodeados por un paisaje donde lo que prima es la naturaleza. También cuenta con un supermercado y una estación de servicio. Tigre tiene propuestas para todos. Para los que sólo quieren conectarse con la naturaleza, para los que prefieren comer una buena parrillada en un ambiente con vista el río y también para los que decididamente optan por un paseo de compras en centros comerciales o los que son capaces de perderse entre la multitud del Puerto de Frutos.