Ahora, los “cuidacoches” reciben reservas por celular y los automovilistas les dejan las llaves

Según denuncian los vecinos de Palermo, los “trapitos” se adueñaron de las calles y desde hace tiempo sus móviles se transformaron en una “valiosa herramienta de trabajo”, ya que los interesados en asegurase un lugar pueden llamarlos y hacer sus reservas. Una vez recibida la comunicación, proceden a colocar conitos naranjas para que ningún distraído ocupe ese sitio. El costo del “servicio” va de los 8 a 10 pesos. Los vecinos del barrio denunciaron el funcionamiento, en Niceto Vega al 5600, de un servicio de valet parking , con estacionamiento de vehículos en la vía pública a un costo de entre 8 y 10 pesos, según informa hoy el diario La Nación. Lo más llamativo es que esto ocurre en espacios libres y gratuitos, y se repite en muchos sitios de la ciudad. El artículo consigna que impunemente, los "trapitos", que dicen ganar cada noche del fin de semana no menos de 300 pesos, "reservan" los espacios vendidos vía celular con conos anaranjados, para que a nadie pueda ocupar el sitio, ya apalabrado telefónicamente. Un ejemplo, es del Niceto Vega entre Fitz Roy y Bonpland, donde algunos "cuidacoches" tienen pecheras anaranjadas y utilizan teléfonos celulares. Ofrecen, incluso, el lavado del auto por sólo 15 pesos. Al ser consultados sobre si tenían permiso para trabajar allí, contestaron que estaban habilitados, pero inmediatamente eludieron responder otras inquietudes. Autoridades de la Agencia Gubernamental de Control de la ciudad negaron que el lugar "esté autorizado para la actividad de cuidacoches o valet parking" , por lo que el desarrollo de tales actividades supone "una falta contravencional". Precisamente, el artículo 79 del Código Contravencional porteño establece que "quien exige retribución por el estacionamiento o cuidado de vehículos en la vía pública sin autorización legal es sancionado con 1 a 2 días de trabajo de utilidad pública o multa de 200 a 400 pesos. Cuando existiera previa organización, la sanción se elevará al doble para el caso del organizador". Pero el texto de la ley poco tiene que ver con lo que en realidad ocurre: los "cuidacoches" ejercen su actividad con total libertad; en muchos casos, incluso, exigen el pago por adelantado y con una suma fija. Vale apuntar también que la policía sólo puede sancionar a los conocidos "trapitos" en caso de que los sorprenda dañando un vehículo o en el acto mismo de reclamar el dinero. En el Ministerio Público Fiscal de la ciudad admitieron que la actividad creció, aunque no se refleje en el número de denuncias ingresadas en ese organismo en lo que va del año, en relación con 2007. Una alta fuente policial de la seccional 29a., que tiene jurisdicción en la zona, señaló que “no hay denuncias por esta actividad en Niceto Vega y, por lo tanto, no se puede actuar al respecto. Hacemos muchas infracciones a los vehículos que están mal estacionados". Un automovilista aseguró que en Fitz Roy y Córdoba un "cuidacoches" le entregó un volante donde podía leerse: "Parket. Av. Fitz Roy y Córdoba. Estamos de 0 a 7. Reserve su lugar". En la zona conocida como Las Cañitas, poblada de bares y restaurantes de moda, hay "cuidacoches" y mucho desorden a la hora de dejar los vehículos. Las rampas para discapacitados están bloqueadas y los autos son estacionados en las esquinas. Según un vecino de la zona, hay un "trapito" al que la gente le deja los vehículos con las llaves, parados en doble fila, para que aquél se los estacione. "Es tan popular que hasta Diego Maradona, cuando viene, lo saluda". Daniel Amoroso, presidente de la Comisión de Tránsito y Transporte de la Legislatura porteña, aseguró que “tiene que haber un control mayor para evitar la actividad de estos cuidacoches y, además, preservar a los vecinos que viven en la zona y a los automovilistas” Y agregó que “muchas veces esta gente se comporta como si fuera dueña de la calle y hace que los automovilistas estacionen en lugares donde no está permitido, lo que agrava el caos de tránsito. También causa un problema extra de inseguridad, porque es gente que está controlando los movimientos de quienes circulan por la zona". La diputada macrista Silvia Majdalani, presidenta de la Comisión de Uso y Espacio Público de la Legislatura, explicó: "Hay un vacío en la ciudad con los valet parking ; si se regulara la actividad, la situación se ordenaría".